Wednesday, June 4, 2014

Siempre

Siempre, por Locución adverbial: Perpetuamente o por tiempo sin fin.

Es común que en las canciones cristianas se haga referencia, se mencione, o incluso se repita varias veces la frase: “siempre” “por siempre”  o cualquiera de sus derivados.

Hace unos domingos, en el momento de adoración cantaron una de estas; la verdad no recuerdo cual, solo se que en esta canción (como en la mayoría) se hace referencia a la eternidad. Al momento de gloria cuando estemos con Cristo.

Que momento más digno de recordar que este!, cierto?

Pero…

Mientras pronunciaba la palabra “siempre” mi mente escribía en felpa roja “y ahora?”. 
No estoy diciendo que la canción era mala. PARA NADA!
No digo que este mal pensar en el futuro. Ni siquiera lo pienses.
No. Digo que muchas veces debemos comenzar a cantar de una adoración “ahora.”

El siempre, esta formado por muchos ahora.
No se que tan científica o que tan absurda sea esa afirmación; pero así pareciera en nuestro sistema de tiempo. No puedes tener un siempre si no tienes, al menos, varios millones de gúgolduplexes* de ahoras (permítanme la exageración)

No quiero seguir aspirando solamente a un futuro de adoración y devoción a Dios. Quiero empezar mi “siempre” ahora. Y unirme a la adoración que ha estado sucediendo desde siempre.

Salmos 29:
Tributad al Señor, oh hijos de los poderosos  tributad al Señor gloria y poder.
Tributad al Señor la gloria debida a su nombre;  adorad al Señor en la majestad de la santidad.
Voz del Señor sobre las aguas. El Dios de gloria truena,
el Señor está sobre las muchas aguas. La voz del Señor es poderosa,
la voz del Señor es majestuosa. La voz  del Señor rompe los cedros;
sí, el Señor hace pedazos los cedros del Líbano; y como becerro hace saltar al Líbano;
y al Sirión como cría de búfalo.
La voz del Señor levanta llamas de fuego. La voz del Señor hace temblar el desierto;
el Señor hace temblar el desierto de Cades.
La voz del Señor hace parir a las ciervas y deja los bosques desnudos, y en su templo todo dice: ¡Gloria!
El Señor se sentó como Rey cuando el diluvio; sí, como Rey se sienta el Señor para siempre. El Señor dará fuerza a su pueblo; el Señor bendecirá a su pueblo con paz.


Tal vez esta sea la única forma en que “vive tu mejor vida ahora” sea aplicable.